Consejos prácticos para el cambio de armario de primavera a verano
- Publicado por:
- Victor
- No hay comentarios
El verano está a la vuelta de la esquina y eso significa que es el momento de hacer cambio de armario. El frío se va y llega el calor, por lo que es momento de decir adiós, durante un tiempo, a los abrigos y la ropa de manga larga para dar paso a una ropa más ligera y fresquita.
En la mayoría de casos, hacer el proceso de cambio de armario puede dar mucha pereza, lo que conlleva a posponer esta tarea. Sin embargo, con algunos consejos es muy fácil conseguir organizar los armarios de una manera eficiente. En este artículo, te vamos a contar 10 cosas que puedes hacer para que el cambio de armario sea algo más llevadero.
1.- Limpia el armario y organiza la ropa de invierno
Una vez que vas a hacer el cambio de armario, de paso, es recomendable limpiar a fondo. Saca todas las prendas de invierno y agrúpalas en dos montones: guardar y tirar o regalar. Las prendas que son nuevas o que están en buen estado las puedes guardar en cajas etiquetas, bolsas herméticas o en cajones donde estén bien protegidas de cara a la próxima temporada; la ropa que esté estropeada, descolorida o rota la tiramos o la convertimos en trapos; y la ropa que ya no nos guste o no nos quede bien la podemos regalar a personas cercanas que sí vayan a darle un uso.
2.- Comprueba tu ropa de verano
Cuando hayas sacado y organizado la ropa de invierno, saca y observa tus prendas de verano. Pero no las metas sin pensar en el armario. Lo recomendable es revisar todas las prendas para ver cuáles están en buen estado para seguir usando, para ver cómo te quedan de un año a otro y, por supuesto, comprueba si aún te gustan esas prendas o se ajustan a tu estilo.
3.- Prioriza los básicos
Cuando se organiza un armario, algo esencial es darle prioridad a esas prendas fáciles de combinar y que puedes ponerte a diario para cualquier ocasión informal como, por ejemplo, vaqueros, camisetas de colores neutros y sin estampados, alguna chaqueta fina, vestidos de colores lisos y todas aquellas prendas fresquitas y cómodas que te ayuden a afrontar el calor.
4.- Organiza por categorías y colores
Si estás colocando toda la ropa de verano, lo mejor es hacerlo en diferentes montones para tener siempre tus prendas localizadas y que te sea más fácil seleccionarlas a la hora de elegir cualquier outfit. Puedes organizar por prendas: camisetas, vestidos, faldas o vestidos. También puedes organizarlas por colores: rosa, verde, estampados, azul, amarillo, rojo, naranja, colores oscuros y blanco. Haciendo esto, no solo tendrás un armario más organizado, sino que ahorrarás tiempo a la hora de vestirte.
5.- Aprovecha bien el espacio
Es muy importante utilizar bien cada rincón del armario, sobre todo si no es un armario excesivamente grande. Para lograr este objetivo puedes utilizar organizadores, perchas múltiples en las que colgar varias prendas o cajas apilables para aprovechar el espacio vertical. Además, puedes envasar al vacío cosas que ocupen mucho como, por ejemplo, colchas y edredones para, de esta manera, ganar espacio útil.
6.- Renueva los accesorios
Con el cambio de estación también llega el cambio de accesorios, por lo que es hora de guardar aquellas prendas que nos protegen del frío para dar paso a las que nos ayudan a prevenir y combatir el sol y el calor como, por ejemplo, gorras, abanicos, sombreros o viseras.
7.- Selecciona bien los tejidos que quieras encontrar en tu armario.
Es importante que los tejidos que elijas para tener en tu armario sean frescos y transpirables para poder sentirnos cómodas durante la estación más calurosa del año. Lo recomendable es tener prendas de algodón, lino o seda puesto que permiten la circulación del aire y absorben la humedad. Evita lanas y todo lo que te haga sentir incómoda durante el verano.
8.- Almacena adecuadamente la ropa de invierno
Una vez que ya hayas organizado la ropa de verano en tu armario, es necesario que dediques un poco de tiempo en guardar bien las prendas que no vas a estar utilizando durante esta estación. Lávalas bien antes de almacenarlas y utiliza bolsas herméticas, cajas etiquetadas o envasado al vacío para protegerlas del polvo y la humedad.
9.- Crea conjuntos y outfits de verano
Para tener un armario super organizado, cuando ya tengas claro cuáles serán las prendas que vas a utilizar durante el verano, lo recomendable es hacer diferentes combinaciones para tener referencias fáciles y rápidas a la hora de elegir outfit.
10.- Decide qué hacer con las prendas que ya no quieres
Cuando se hacen los cambios de armario, suele ocurrir que no todas las prendas de la temporada anterior continúan. Si están estropeadas, lo mejor es tirarlas o intentar reutilizarlas para otras cosas pero, en cambio, si está en buen estado puedes regalarlas o venderlas, seguro que hay otras personas a las que les encantaría tener tu ropa.
Conclusión
A modo de resumen, hacer el cambio de armario de primavera a verano puede resultar una tarea bastante trabajosa pero, al mismo tiempo, muy gratificante. Si sigues algunos consejos prácticos, el resultado hará que el esfuerzo merezca la pena. Recuerda: limpia el armario y organiza por montones, aprovecha al máximo el espacio del que dispones y regala o tira aquello que ya no te sirva. Y es que, como solía decir mi madre: “Ya que lo haces, hazlo lo mejor posible”. ¡Organiza bien tu armario y empieza el verano sin preocupaciones!